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Tu teléfono móvil es un gran aliado para muchas cosas, pero es bastante habitual llegar a casa y tener que darle un poco de carga a la batería. Buscar una toma de corriente para enchufarla con ese cable tenso puede no ser tan elegante como te gustaría. Para ello, ¡tenemos cargadores inalámbricos! Por supuesto, sigue siendo necesario enchufarlo, pero olvídate de ese enchufe en tu teléfono, ¡déjalo encendido y adelante!
Con este artículo, conocerás la tecnología y estarás preparado para elegir el mejor modelo de cargador inalámbrico. Además, también puedes consultar el ranking de los 10 mejores cargadores inalámbricos del mercado.
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¿Cómo funcionan los cargadores inalámbricos?
Los cargadores inalámbricos son una tecnología relativamente nueva. Cuentan con bobinas que crean un campo electromagnético cuando reciben energía de la toma de corriente. Para cargarlo es sencillo, solo tienes que dejar tu teléfono apoyado en la base, esta reconocerá este campo y lo convertirá en carga de batería ¡sin necesidad de cables!
Con estos dispositivos, no es necesario seguir buscando el enchufe del móvil. Esta comodidad es su principal ventaja. Además, es compatible con todos los aparatos electrónicos con tecnología IQ, así que si tienes un reloj, o unos auriculares compatibles, solo tienes que dejarlo encendido y esperar.
¿Te interesa? Entonces, ¡consulta nuestros consejos a continuación y elige el mejor cargador para ti!
Cómo elegir el mejor cargador inalámbrico
Ahora ya sabes cómo funciona la tecnología IQ, pero para elegir el cargador ideal también necesitas saber un poco más sobre la potencia, la distancia de detección, las dimensiones y otras especificaciones técnicas.
10W de potencia pueden cargar tu móvil más rápido
La carga inalámbrica, aunque es práctica, suele ser más lenta que la carga por cable. Para minimizar esta diferencia, es importante que vigiles la potencia de tu dispositivo: cuanto más grande sea, más rápido tenderá a ser.
Encontrarás modelos en el mercado con una potencia a partir de 5W. El valor ideal dependerá de la marca de tu aparato. Para los productos con sistema Android, lo ideal es 10W de potencia. En Dispositivos Apple, por su parte, la marca recomienda utilizar cargadores de 7,5W.
Para ser más práctico, comprueba la distancia máxima de detección
La practicidad se acaba si cada vez que necesitas cargar el teléfono tienes que quitar la funda, ¿verdad? Para evitarlo, elige cargadores que reconozcan tu teléfono a una distancia superior a 3 mm. Si utilizas una funda muy gruesa, hay opciones que cargan hasta a 8 mm.
Pero ten cuidado si tu funda tiene imanes u objetos metálicos, estos elementos se interpondrán a la hora de cambiar la carga entre dispositivos. Así que, aunque la distancia sea adecuada, tendrás que quitar la tapa de todos modos.
Opciones preferidas con indicadores LED de funcionamiento y de carga completa
Al igual que con la toma de corriente, no es bueno dejar el aparato enchufado incluso después de que se haya completado la carga. Esto puede hacer que el teléfono se caliente o incluso sobrecargue los componentes electrónicos. Casi no ocurrirá nada crítico, pero puede acortar la vida del aparato.
Para evitar este tipo de problemas, algunos cargadores inalámbricos tienen LEDs que informan cuando la carga está completa, para que puedas retirar el teléfono del cargador. También hay productos con LEDs que te indican cuando tu teléfono está mal colocado y, por tanto, no se está cargando. Ambos son muy útiles, compruébalos.
Comprueba si el cargador viene con una fuente de alimentación
Aunque no requiere que conectes nada a tu teléfono, el cargador inalámbrico necesita una fuente de alimentación para ser enchufado. Después de todo, tiene que recibir energía de algún sitio, ¿no? Pero ¡cuidado! Estas fuentes no suelen venir con el producto.
Intenta utilizar la fuente de alimentación que viene con tu teléfono, ya que te proporcionará la potencia adecuada para cargar tu dispositivo lo más rápidamente posible. Evita las fuentes de corriente demasiado elevadas, como los ordenadores portátiles o los ipads, ya que pueden dañar el producto. También debes evitar las fuentes de alimentación débiles o genéricas, ya que pueden cargar muy lentamente.
Atención a las dimensiones del producto
La mayoría de los cargadores inalámbricos son redondos y tienen el aspecto de un portavasos. Esto puede ser bastante funcional, ya que la base redonda es bastante discreta y bonita. Pero su tamaño compacto puede acabar dificultando un poco la colocación de tu teléfono en él.
Las bases cuadradas suelen ser más fáciles de colocar el teléfono correctamente. Sin embargo, aunque elijas una base redonda, prefiere cargadores con un diámetro superior a 8 cm. Comprueba también el grosor del producto: cuanto más fino, más discreto. Hay modelos con solo 0,5 cm, ¡vale la pena comprobarlo!
Algunas funciones adicionales pueden hacer que el cargador sea aún más útil
La tecnología inalámbrica ya ofrece mucha comodidad, ¡pero podemos ir más allá! ¿Qué tal un cargador inalámbrico doble? Con él, puedes cargar tu teléfono móvil y tu reloj al mismo tiempo. También hay cargadores inalámbricos que funcionan como cargador portátil (power bank).
Además de estos aspectos prácticos, algunos elementos de seguridad pueden garantizar un funcionamiento fluido. El detector de objetos extraños, por ejemplo, corta la corriente cuando identifica en él objetos que no son un teléfono móvil. También hay aparatos con apagado automático cuando la batería está llena, que evitan la sobrecarga.
